El PSOE de Abadín denuncia el "grave estado" del agua de la traída
El Grupo Municipal Socialista de Abadín, a través de su portavoz Pablo Díaz, denuncia la grave situación del agua de la traída en varias parroquias del municipio y la pasividad del alcalde, Xosé María López Rancaño, que continúa negando los hechos pese a la preocupación creciente del vecindario.
Segundo explica Díaz, en las últimas semanas numerosos vecinos advirtieron de que el agua “sale marrón” en varios puntos del ayuntamiento, un problema que no es puntual ni reciente: “lleva repitiéndose desde octubre y el alcalde sigue sin ofrecer ni explicaciones ni soluciones”.
El portavoz señala que recientemente se registraron casos de gastroenteritis que podrían estar relacionados con la situación: “No podemos asegurar que sean consecuencia directa del agua, pero es evidente que el estado de la traída es preocupante y que el gobierno municipal no ofreció ni datos ni información fiable para tranquilizar al vecindario”, subrayó.
En cuanto a la reacción del regidor, Díaz insiste que Rancaño mantiene “su actitud habitual”: “Se limita a decir que nadie le dio quejas, y ni siquiera es capaz de aclarar si el agua es o no apta para el consumo. Esta falta de responsabilidad es inadmisible”.
Los socialistas recuerdan que garantizar la calidad del agua es un deber básico e ineludible del Ayuntamiento. “Hablamos de un servicio esencial para la salud pública. El alcalde no puede escudarse en el ‘no sé nada’. El mínimo es informar, actuar y garantizar la seguridad del vecindario”, advirtió el portavoz.
El Grupo Municipal Socialista reclama al gobierno local información inmediata, análisis actualizados y total transparencia, porque “la salud de los vecinos y vecinas no puede depender de la improvisación ni del silencio de un alcalde más preocupado por negar la realidad que por proteger a la ciudadanía”.
“Estamos ante un problema muy serio. El alcalde debe actuar ya, ofrecer información rigurosa y garantizar que el agua es segura y apta para el consumo. El que no puede hacer es seguir escondiendo la realidad y dejar el vecindario de Abadín a su suerte”, concluyó Díaz.