El SLG y Petón do Lobo celebran la paralización definitiva de la mina de San Acisclo en Muras
El Sindicato Labrego Galego (SLG) y la Asociación Petón do Lobo celebran la resolución judicial que pone fin de manera definitiva al proyecto minero de San Acisclo, promovido por la empresa Materiales Cerámicos Materias Primas SL en el municipio de Muras (Lugo). La Administración de Justicia de Madrid no admitió a trámite el recurso de casación presentado por la Xunta de Galicia y por la empresa promotora, confirmando así la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Galicia que, en 2024, había anulado la concesión otorgada por el Gobierno autonómico.
Las organizaciones ecológicas y agrarias destacan que esta decisión “supone una victoria de la vecindad y de los colectivos que durante años lucharon para frenar un proyecto lleno de irregularidades y con graves impactos ambientales”. Margarida Prieto Ledo, coordinadora de la lucha contra el acaparamiento de tierras en el SLG, aseguró que “la paralización es firme” y recordó que el proyecto vulneraba directivas europeas de conservación de hábitats y de aguas, además de situarse dentro de la Reserva de la Biosfera Terras do Miño.
El Sindicato Labrego Galego y Petón do Lobo denuncian que, desde el inicio, la Administración gallega “actuó a favor de la empresa, ignorando informes técnicos y sociales”, y felicitan a la vecindad y al Ayuntamiento de Muras por su firme defensa del territorio.
La lucha contra la mina comenzó en 2020, cuando el SLG solicitó información sobre la concesión y advirtió de sus deficiencias. Posteriormente, distintos colectivos ecologistas, la Diputación de Lugo e incluso el Comité Español del Programa MaB de la UNESCO cuestionaron la falta de evaluación ambiental y la afección a espacios protegidos.
Para las entidades, esta decisión judicial marca “un antes y un después” en la defensa del medio rural y del patrimonio natural gallego. “Una vez más, ha tenido que ser la ciudadanía quien hiciera cumplir la legalidad frente a un modelo que pretende explotar el territorio sin respeto ni planificación”, concluyó Prieto Ledo.