La pasión por el baloncesto no tiene límite de edad en Vilalba
El CB Terra Chá ha demostrado que no hay límite de edad para competir en baloncesto. Este año, siguiendo la línea iniciada anteriormente con el equipo femenino, el club lanzó un equipo de veteranos masculino para participar en la nueva categoría creada por la Federación Gallega de Baloncesto. La idea surgió de la propia federación, que probó en la temporada pasada con una liga femenina de veteranas. Debido al éxito obtenido, este año se amplió al masculino.
Los requisitos no eran muchos, bastaba con conseguir 4 clubes interesados en participar. El CB Terra Chá, con sede en Vilalba, no lo dudó y se inscribió. Finalmente, se superaron las expectativas al reunir a 11 clubes, seis en el grupo Galicia Norte y cinco en el Sur.
El CB Terra Chá reunió a más de 20 jugadores junto con la categoría Sénior, ya que ambas categorías podían compatibilizarse. Así, establecieron el corte en los nacidos en 1990. Los mayores pasaron a formar parte del nuevo equipo, alrededor de 18, mientras que los más jóvenes se quedaron en el sénior de Tercera División, que cuenta con unas 15 licencias.
Tanto los entrenamientos como las convocatorias para los partidos se organizan en paralelo para los dos equipos, y la creación de este nuevo grupo permite dar más opciones de juego a todos los que ya estaban en el club. “Esto es así porque el Sénior lleva muchos años de historia y cuenta con un gran número de jugadores. Al tener solo un equipo, el aumento de licencias impedía que todos pudieran jugar”, explica su presidente, Manuel Crende.
“Esta fue la manera que encontramos para no dejar jugadores fuera y para enganchar a algunos que habían dejado de jugar por problemas para compatibilizar el trabajo con los entrenamientos y los partidos todos los fines de semana”, añadió.
Esta experiencia también ha traído muy buenos resultados, ya que el equipo se encuentra en la parte alta de la tabla, acumulando victoria tras victoria con amplias ventajas en el marcador. A falta de dos partidos para el final de la primera fase, tienen todo a su favor para clasificarse y luchar por el título, ya que cuentan con ventaja sobre sus rivales.
La peculiaridad de este equipo es la diversidad en la preparación física de sus jugadores. Las edades oscilan entre los 34 años, los más jóvenes, y otros que rondan los 60. A pesar de ello, los jugadores del CB Terra Chá aseguran que “somos los júnior de los veteranos”.
Los dos equipos tienen sus entrenamientos los miércoles en Vilalba y los lunes y viernes en Lugo. Esto se organiza así porque muchos de los jugadores son de la ciudad o localidades cercanas y también por la falta de instalaciones en Vilalba. “Los veteranos no siempre pueden venir los tres días, pero damos la opción y que asistan quienes puedan”, añade.
Lo que deja claro este nuevo equipo es que la afición viene desde dentro y no entiende de edad ni de profesión. De hecho, las ocupaciones de los jugadores mayores son múltiples y variadas: entre ellos hay un enfermero, tres profesores, un práctico de puerto, un oficinista, un empleado de industria, un sindicalista, empleados de banca, un médico e incluso un mecánico.
El objetivo ahora es consolidar el equipo y siguen buscando a personas que hayan estado en las escuelas y en el equipo para que regresen. “Todos los años hay cambios y siempre se renuevan jugadores, por eso siempre tenemos las puertas abiertas”, recalca Crende.
LA BASE
Con este equipo, el CB Terra Chá ya gestiona tres conjuntos, ya que desde hace años cuenta con un femenino sénior. Además, gestionan las escuelas deportivas de Vilalba, que cuentan con 40 niños inscritos, aunque no han formado un equipo de competición. Hace tres años presentaron un equipo de preminibásquet, pero al crecer y cambiar de categoría algunos de los jugadores por edad, el equipo se disolvió. “Es muy complicado en villas pequeñas poder tener un equipo de competición en deportes que no sean fútbol”, explica.
De este modo, y para ofrecer opciones a quienes quieran competir, el CB Terra Chá tiene una colaboración con el club Cidade de Lugo, con el que comparten jugadores de competición y entrenadores, aunque los entrenamientos se realicen en Vilalba. Esto se debe a que el Cidade de Lugo tiene equipos de base pero no sénior. Por otro lado, desde el club tienen claro que los niños deben elegir si quieren jugar simplemente o competir. “Siempre damos esa opción porque el niño debe divertirse siempre”, añaden.
Dentro de la base también tienen un grupo de cadetes, aunque no han formado equipo por falta de jugadores suficientes. Sin embargo, trabajan con ellos, entrenándolos junto con el sénior femenino y dándoles salida en otros clubes.