La Xunta supervisa las mejoras realizadas en el local vecinal de Soexo, en Vilalba
La directora general de Administración Local, Natalia Prieto, junto con el delegado territorial de la Xunta en Lugo, Javier Arias, visitó las instalaciones de las asociaciones vecinales Nuestra Señora de las Angustias de Soexo y San Simón, donde comprobó las mejoras hechas con el apoyo de la Xunta. El Gobierno gallego colaboró en las obras con respectivas aportaciones de 12.000 euros en el marco del Plan específico de acción comunitaria, que este año benefició en la provincia de Lugo más de 30 colectivos con cuantías que suman cerca de 270.000 euros.
No caso de nuestra Señora de las Angustias de Soexo las obras permitieron mejorar la climatización y el ahorro energético, así como la accesibilidad de la casa-escuela. En esta línea, se instaló una estufa de pellets y se adaptó el baño para ser utilizado por personas con movilidad reducida. A mayores, se pintó el interior y el exterior del local.
Por su parte, la asociación San Simón mejoró también la accesibilidad de su casa-escuela, con la adaptación de los baños para personas con movilidad reducida, instalando una cuesta y barras adaptadas, además de cambiar las piezas para hacerlas también accesibles. También se reparó la balaustrada del edificio y se instaló una fosa séptica.
Segundo señaló la directora general, el objetivo de las medidas es garantizar el bienestar de las personas usuarias en el desarrollo de las múltiples actividades organizadas por estas entidades, “fundamentales para la dinamización de la vida social y cultural del vecindario”.
Estos dos colectivos forman parte de las 341 entidades beneficiarias de los 3 millones de euros concedidos este ejercicio a entidades vecinales, asociaciones de mujeres rurales y comunidades de usuarios de aguas de Galicia. Durante la visita, Natalia Prieto señaló que el compromiso de la Xunta con asociacionismo local hace que el próximo año se incremente el presupuesto de la medida en un 33,3% hasta los 4 millones de euros.
“Se trata así de darle respuesta al éxito de estas ayudas en los últimos años y a la elevada demanda”, segundo apuntó la directora general. “Queremos también reconocer el papel fundamental de estas entidades en la calidad de vida en el entorno local”, añadió.
Apoyo para obras y equipación
Hace falta recordar que estas ayudas cuentan con dos líneas, una de ellas con una aportación máxima de 12.000 euros para obras de acondicionamiento, reforma y ampliación de los locales de asociaciones de vecinos y de mujeres rurales, con actuaciones como la eliminación de barreras arquitectónicas o mejoras en estructuras, fachadas, cubiertas, parámetros interiores, ventanas, techos u obras de fontanería, saneamiento o electricidad.
Además, con estas ayudas en las infraestructuras e instalaciones de las traídas de agua comunitarias promovidas por comunidades de usuarios de aguas se actúa en obras sobre captaciones, canalizaciones y depósitos destinadas a reducir las pérdidas de agua y en otros trabajos con los que mejorar la gestión, medición o control de la calidad del agua u optimizar la eficiencia energética en la traída de aguas.
La otra línea va destinada con un máximo de 5.000 euros a la dotación de equipación para el funcionamiento de estas entidades y la organización de actividades específicas, lo que incluye la adquisición de mobiliario, equipación informática, audiovisual o sistemas de climatización.